Porque desde el primer momento, desde el primer día que nuestros labios se juntaron, supe que de ahí había algo muy fuerte que nos unía, y eso poco a poco ha ido a más. Desde el primer "te amo" sincero que nos dijimos, supe que ahí nuestra boda ya estaba hecha, sin invitados ni nada, solos tú y yo.
Vivan los 20 meses y viva tú |
No hay comentarios:
Publicar un comentario